El agua debe ser húmeda. El fuego debe ser caliente. Uno no puede quitarle la humedad al agua y seguir teniendo agua. Uno no puede quitarle el calor al fuego y seguir teniendo fuego.
Del mismo modo, no podemos quitarle el amor a Dios y pretender que siga existiendo. Porque Dios fue y es amor.
Examínalo bien a fondo. Explora cada rincón. Investiga cada ángulo. Solamente encontrarás amor. Vete al principio de cada decisión que Él haya tomado y lo encontrarás. Vete al final de cada historia que haya contado y lo verás.
AMOR.
Ni amargura. Ni mal. Ni crueldad. Solo amor. Amor intachable. Amor apasionado. Vasto y puro amor. Él es amor...