LA ORACIÓN DE UN ADORADOR 4: Oraciones de Alabanza
La vida de un adorador es acerca de la vida con Dios. La comunión diaria y un estado constante de humildad ante sus pies. Al igual que una fragancia rota, nos vertemos sobre los pies de Jesús, sin embargo, Él es el que enjuga las lágrimas y lava las manchas. (Mateo 26.7-9)
No se trata tanto de que ser un líder de cualquier tipo, se trata de que seas un adorador - un adorador que toma enserio la oración tanto como Dios toma enserio escuchar nuestras oraciones.
Dios desea tus oraciones. Entiende que no se trata de uno mismo. Este descubrimiento es fundamental para tu identidad: eres hijo de Dios. Cuando se trata de lo que haces y lo que eres, no tiene nada que ver con las expectativas de otra persona, pero todo que ver con lo que sos en Él.
A veces trabajamos tan duro que perdemos nuestra verdadera identidad. Piensa esto: Dios no te ha llamado como trabajador, sino como un hijo o una hija. El ministerio se trata de ver a Cristo dentro de ti, Él haciendo el trabajo a través tuyo. Comienza a dejar que Él obre en ti.
Necesitamos encontrar nuestra verdadera identidad; un hijo o una hija del Rey por ser quienes realmente somos en Cristo. No un líder de alabanza, no un director, no un director general, ni siquiera un padre ocupado o mujer comprometida - sino un simple niño que depende de amor incondicional del Padre Celestial, provisto de cuidados, gracia, y protección.
Cuando veo a mí mismo a través de esta lente, todo lo demás que hago - o debería hacer - se hace más claro.
Tu identidad no está sólo en Cristo, sino en los ojos de Cristo - no en los ojos de los demás. Gálatas 4.6-7 "porque sois hijos, Dios envió el Espíritu de su Hijo a nuestros corazones, el cual clama: "¡Abba! !Padre!" Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero a través de Dios."
Dios está buscando hijos e hijas que alaben de corazón, no por ocupación. Echa un vistazo más de cerca de la forma en que Dios te mira, y encontrarás lo que Él te creó para que fueras Su adorador, Su hijo.
Dios no está buscando a líderes de alabanza, Él está buscando hijos que lo alaben y busquen sinceramente. Y, Él está buscando y escuchando a esos adoradores orar.
Nuestra oración de hoy: Padre, por favor, dame los ojos de un niño para verte. Dame las expresiones y las palabras en mi corazón para darte alabanza en sincera adoración. Perdóname por la retención de los ecos que quieres oír de mi alma. Me dirijo a ti como tu volteas tu oído para oír mi voz. Te amo, Señor. Gracias por oír, escuchar, dar y proveer para todas mis necesidades. Para que pueda yo compartir tu amor con los demás.