"Tú puedes hacer esto", me dije. Miré hacia arriba hacia el cartel del gimnasio: Una vida saludablemente activa.
Esto era irónico para mí, porque yo ya había pasado veinte y cinco años de mi vida evitando el gimnasio. ¿Cuánto tiempo había pasado desde mi última visita? ¿Un mes? ¿Dos meses?
Traté de imaginar cuánta actividad de la que veía en los carteles (pesas, cinta, aeróbica, pilates) era capaz de hacer, y me pareció todo tan difícil! "Es sólo una hora de mi día, yo me encargo", me dije a mi misma, y rápidamente salté fuera de mi auto, lista para probar mi derecho a la propia conciencia.
Pasé a través de las puertas del gimnasio con mi cola de caballo alta y una botella llena de agua; mi tarjeta de entrada fue preparada. Le sonreí a una mujer joven y rubia que estaba a cargo de la entrada, y luego continué rápidamente a los vestuarios.
"Disculpe, señora" La mujer rubia me detuvo en su camino. "Usted todavía debe $ 89.00 de las cuotas de afiliación de los últimos dos meses." Su sonrisa era aguda, y un poco demasiado alegre para decirme una noticia tan difícil.
Esto era irónico para mí, porque yo ya había pasado veinte y cinco años de mi vida evitando el gimnasio. ¿Cuánto tiempo había pasado desde mi última visita? ¿Un mes? ¿Dos meses?
Traté de imaginar cuánta actividad de la que veía en los carteles (pesas, cinta, aeróbica, pilates) era capaz de hacer, y me pareció todo tan difícil! "Es sólo una hora de mi día, yo me encargo", me dije a mi misma, y rápidamente salté fuera de mi auto, lista para probar mi derecho a la propia conciencia.
Pasé a través de las puertas del gimnasio con mi cola de caballo alta y una botella llena de agua; mi tarjeta de entrada fue preparada. Le sonreí a una mujer joven y rubia que estaba a cargo de la entrada, y luego continué rápidamente a los vestuarios.
"Disculpe, señora" La mujer rubia me detuvo en su camino. "Usted todavía debe $ 89.00 de las cuotas de afiliación de los últimos dos meses." Su sonrisa era aguda, y un poco demasiado alegre para decirme una noticia tan difícil.
Hice una mueca y de mala gana saqué mi tarjeta de débito de mi cartera.