Las costumbres van cambiando a ritmo vertiginoso en este comienzo de siglo. Las razones para tomar esta decisión son innumerables, a saber, ahorrar el gasto de un alquiler al pagar solo uno, probar a ver si funciona la relación, no querer "atarse" a una relación que no se sabe si durará para toda la vida, etc, etc.
Cualquiera sea el motivo, lo que podemos asegurar es que está muy alejado de la voluntad de Dios, ya que el matrimonio está dentro de los planes de Dios para la humanidad. Es por medio del matrimonio que Dios bendice la unión de un hombre y una mujer. Es en el marco del matrimonio donde el sexo tiene mayor deleite, además de esconder el misterio de la unión de Cristo con la Iglesia (Efesios 5:25-32). Quienes se unen sexualmente fuera del matrimonio no se ajustan a la voluntad de Dios.
Pero hoy día, el post-modernismo va cambiando la escala de valores e instalando costumbres "top", las cuales distorsionan la verdad dicha por Dios desde el principio de los tiempos. Cuánto dolor nos ahorraríamos si prestáramos atención a cuál es la voluntad de Dios para nuestra vida y para cada decisión que tengamos que tomar
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¿Qué hago como madre?
La mejor brújula para madres desorientadas es la Palabra de Dios, que no se pasa nunca de moda, ya que es eterna, y su vigencia es perfecta para el día que vivimos. Primeramente necesitamos saber qué dice Dios sobre el matrimonio, sobre el concubinato, sobre el ser fiel a Su Palabra.
Mujer: Dios te ha puesto en esta familia para ser luz. Si tus consejos proceden del Espíritu del Señor, estarás preservando y bendiciendo a tus hijos aunque eso signifique que estés en contra de las decisiones que han tomado. Recuerda que el amor y la misericordia de Dios son infinitos, y la Palabra que siembres nunca volverá vacía.
Así será mi palabra que sale de mi boca, no volverá a mí vacía
sin haber realizado lo que deseo, y logrado el propósito
para el cual la envié. Is 55:11
Autor: P.O. - www.hacedoras.blogspot.com