Durante todo el camino a través de las Escrituras desde Génesis capítulo 2 vemos que en el matrimonio un hombre y una mujer dejan a sus padres y están unidos por Dios para establecer otra unidad de familia.Esta es una foto del matrimonio de Cristo y su Iglesia (su novia), a la cual amó y por ella se entregó a sí mismo.
Nuestros matrimonios deben estar llenos de este amor de Cristo, dándoles una santidad y un testimonio poderoso del mundo, cosa que Satanás odia. ¡Odia todo lo que es precioso para Cristo!
El matrimonio es para la crianza de los niños en un ambiente de amor seguro. Vemos el problema en la sociedad donde los niños son criados sin esta seguridad, y la inestabilidad que trae a los niños cuando este se rompe.
En nuestro versículo: "Un hombre" indicaría una persona madura que es capaz de tomar la decisión positiva de "dejar" a sus padres, y la responsabilidad que va con esa decisión. Ser "una sola carne" indicaría unidad de la actividad y sus objetivos, así como la relación física.
El matrimonio es la relación dada por Dios para la exposición de nuestros afectos y deseos naturales.
El matrimonio es hasta que el Señor venga la muerte o se rompe el vínculo. Mateo 19 v 6 dice: "Lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre".
En el matrimonio también, una persona pierde su propia identidad y ambos se convierten en una nueva persona: "Y los dos serán una sola carne: de modo que son ya más dos sino una sola carne." (Mateo 10:8) Si tomamos a Cristo como nuestro patrón debemos dar nuestro amor a nuestro socio, querer sólo su amor a cambio. (Él nos amó y se entregó a sí mismo por nosotros. Efesios 5 v 25) y como esta se muestra el amor crecerá.
El marido tiene el papel de la responsabilidad como jefe y la esposa como cuerpo, la posición de sujeción. Este es el orden de Dios a los que debemos estar preparados para representar, si queremos su bendición Efesios 5:22, 23 "Las casadas estén sujetas a sus propio marido, como á el Señor. Porque el marido es la cabeza de la mujer." Si estás planeando casarte, podrías preguntarte si estás dispuesta a compartir todo con tu pareja: a ti misma, tu tiempo, tu dinero, tus intereses, tus amigos de modo que todo lo que hagan será sólo lo que ambos están felices de hacer, habiéndolo acordado ante el Señor.
Revisando las Escrituras, no hay más que un ideal para el matrimonio, y es un hombre unido a una mujer. El matrimonio es para gente madura, hombres y mujeres, no niños y niñas, que son capaces de formar una unidad familiar independiente, tanto en las finanzas y como en la responsabilidad moral.
El amor de la relación matrimonial, es un acto de voluntad, bajo la dirección de nuestro Maestro, que se toma en consideración madura de los temas tratados y que perdurará a través de toda la presión y cualquier circunstancia que podría provocar la conclusión que comúnmente se utiliza, 'se terminó el amor'. El Señor ha decretado que el matrimonio es para toda la vida y si queremos la bendición del Señor, debemos seguir sus instrucciones. Es la mentira del diablo que se puede ser feliz con otra persona. Debemos rechazar sus sutiles susurros.