((Por sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque de él mana la vida.)) Proverbios 4.23
Echemos un vistazo al corazón.
Los afectos, la profesión, los sueños... ¿todo está en su lugar?
Tal vez, sin intensión, estemos descuidando lo más importante por preocuparnos por más cosas de las que debemos. Muchas veces nos dejamos llevar por la rutina de todos los días y nos olvidamos de cosas importantes. Es muy importante para nosotros tener un tiempo devocional, un tiempo para hablar con nuestro Padre y mejor amigo, para que pueda aconsejarnos y guiarnos.
Revisar los pasos dados y los futuros, puede darnos una visión de cómo van las cosas.
Descubrir que los resultados no son tan buenos, que los tiempos se extienden más de la cuenta, que las victorias están, pero no alcanzan puede ser el comienzo del cambio.
El fracaso puede aparecer, pero ¡a no desesperar! mirémoslo como una oportunidad, como una chance de la vida para reflexionar, como un toque divino para llamarnos la atención.
Dios puede cambiar nuestra realidad hoy.
¿Qué cosas no hicimos hasta aquí en favor de nuestros ideales, y que tal vez estaría bueno hacer?