Si supieras que vine a ayudar y no a condenar.
Si supieras que mañana será mejor que hoy.
Si supieras que deseo que llegues bien a casa.
Si supieras qué regalo te he traído: vida eterna.
Si lo supieras.
Qué anhelo expresan estas palabras que salen de los labios de Dios. Cuán noble fue al dejárnoslas escuchar. Cuán vital que nos detengamos a escucharlas. Si supiéramos confiar. Confiar en que Dios está de nuestra parte. Confiar en que Dios desea lo que es mejor…
Si pudiéramos aprender a descansar en Él.
Si pudiéramos aprender a creer ciegamente en Él.
Si pudiéramos aprender a depender de Él.
Si pudiéramos aprender a CONFIAR en Él.
La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da.
No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
Juan 14:27
Tomado del Libro Gracia Para Todo Momento - Max Lucado